NOVOCAINE FOR THE SOUL

Cuando arranqué este blog tenía clarísimo que Novocaine for the Soul sería uno de las canciones que iban a desfilar por aquí. No recuerdo ni cómo ni cuando llegó a mis manos. Novocaine for the Soul es el primero de los cinco singles de Beautiful Freak de los Eels, grupo californiano creado en 1995 por Mark Oliver Everett, alias “E”. Si has visto alguna de las películas de la saga de Shrek, seguro que te suenan. Beautiful Freak es uno de sus discazos, repleto de canciones redondas, bellas y enigmáticas.

Tristemente, la vida de Mark ha estado marcada por el sufrimiento. A edad relativamente temprana, sus padres mueren y su hermana se suicida. En este sentido, “E” ha utilizado la música para canalizar ese dolor e intentar superarlo en una especie de actividad terapéutica. Novocaine for the Soul llegó a ser número uno en las listas de rock alternativo estadounidenses y entre los cinco primeros de las listas británicas. La canción empieza con un continuo de suave batería y unas notas en teclado de corte infantil muy características. La novocaína es un fármaco que bloquea la conducción nerviosa, inhibiendo el dolor. Uno de sus componentes derivados, denominado DEAE, tiene un efecto antidepresivo, produce estimulación mental y ligera euforia. La canción, obviamente, tranquiliza:

Esta semana me ha llegado una invitación para participar en el grupo de Linkedin “Universidad de la Ansiedad”, promovido por Iñigo Ochandiano Aranegui, gran profesional y mejor persona: https://www.linkedin.com/groups/9234123/results/content/?keywords=universidad%20de%20la%20ansiedad. Ha coincidido con la semana de la seguridad y salud laboral en Winoa, en la que hemos promovido acciones de bienestar organizacional, incluidas salud mental. Dado que en marzo ya tratamos wellbeing corporativo, centraré este post en estas últimas.

Por qué es importante hablar de salud mental.

Se calcula que una cuarta parte de la población sufre o sufrirá algún trastorno de salud mental a lo largo de su vida. Sin embargo, es un tema que sigue siendo tabú en la mayoría de espacios y, en especial, en el ámbito laboral. Cuidar de la salud mental del mismo modo que cuidamos de nuestra salud física es crucial para tener una vida plena y satisfactoria. Colectivamente, una de las claves para ese cuidado es poder hablar de salud mental sin miedo al juicio o al estigma. Evitar tener que esconder un diagnóstico de trastorno mental o pensar que “si digo que lo tengo, pensarán que ya no soy válido/a”. Por tanto, normalizar los problemas de salud mental nos lleva a una mejor calidad de vida y satisfacción laboral.

Cómo afecta el estrés laboral al bienestar psicológico.

Si se produce de manera prolongada, el estrés puede suponer un importante riesgo para la salud mental de las personas trabajadoras. A fin de minimizar ese riesgo, es aconsejable llevar a cabo acciones preventivas desde las organizaciones. En ese sentido, la conciliación, el establecimiento de descansos, un ambiente laboral satisfactorio o el refuerzo positivo en el trabajo pueden actuar de forma protectora.

Cómo promover la salud mental en las organizaciones.

El World Economic Forum ha publciado una guía para la promoción de la salud mental en el lugar de trabajo que recoge las siguientes recomendaciones para las compañías:

  1. Tomar conciencia del entorno laboral y analizar cómo se puede adaptar para promover una mejora de la salud mental.
  2. Aprender de la experiencia dentro de cada organización, recuperando aquellas medidas que hayan generado un mayor bienestar en la plantilla.
  3. Fijarse en las acciones adoptadas por parte de otras organizaciones, como pueden ser entrevistas periódicas a los empleados que tengan por objetivo analizar y promocionar su desarrollo y bienestar dentro de la organización.
  4. Evaluar las necesidades de cada persona trabajadora con el fin de elaborar mejores políticas en materia de salud mental.
  5. Desplegar medidas prácticas como pueden ser materiales educativos, programas de formación, herramientas de diagnóstico, o el diseño y la implementación de una cultura enfocada al bienestar de los profesionales.
  6. Comunicar cuáles son las fuentes de apoyo a las que pueden recurrir los y las profesionales para pedir ayuda.
  7. ¡Empezar! Hoy puede ser un buen día para poner en marcha acciones de promoción de la salud mental en el trabajo.

GOD SAVE THE QUEEN

Desde que subiera al trono a mediados del siglo pasado, la Reina Isabel II de Inglaterra mantuvo una relación de amor odio con el mundo del rock. Todo empieza con la condecoración de los Beatles con la Orden del Imperio Británico en 1965. Desafortunadamente, al “ocurrente” John Lennon no se le ocurrió decir otra cosa que “creía que había que saber conducir un tanque para recibir algo así”, comentario que desató las iras de los militares que habían recibido anteriormente dicha distinción. Con los años también han acabando hincando la rodilla ante ella, entro otros, Elton John, Mercury, Jagger, Sting o Bono. Pero en paralelo, muchos otros, como los Sex Pistols o The Smiths, la convirtieron en diana de sus dardos más envenenados. Los Sex Pistols publican “God save the Queen” en 1977, arremetiendo con furia contra el “status quo” británico representado por la monarquía. The Smiths, en “The Queen is Dead’, fantasean con la muerte de la reina, a la que imaginan ahogada en su propia soledad. Pero por lo general, la reina Isabel ha contado con las simpatías de gran parte de la nobleza del rock británico. La gran mayoría de músicos que pintaban algo en los 80 participaron en los conciertos benéficos del “Prince’s Trust” del príncipe Carlos. Por su parte, Queen solía concluir sus conciertos con su adaptación del himno patriótico “God save the Queen”. En este sentido, en la última gira de la banda Freddie Mercury terminaba el show ataviado con la corona y capa reales, en un gesto más respetuoso que paródico.

A estas alturas, es indudable que, tanto para detractores como defensores de la monarquía, la Reina Isabel II de Inglaterra, aún vacia de poder, y tras setenta años en el trono, ha sido una de las grandes pioneras del liderazgo femenino a nivel mundial. Curiosamente, en una sociedad aparentemente tan conservadora como la británica, la figura de la Reina ha ayudado a normalizar de manera anticipada una realidad que en otros paises ha tardado o está costando más en llegar.

Lo que es indudable es que, habida cuenta de las estadísticas actuales, las empresas siguen teniendo un debe en este sentido. En este contexto, la pregunta es obvia: ¿Cómo podemos fomentar el liderazgo femenino dentro de las empresas?. Con la finalidad de poder fomentar el liderazgo femenino en tu compañía, hay al menos cinco ideas que puedes llevar a la práctica:

  1. Desarrolla una cultura de empresa, amigable para las mujeres y diversidades. Históricamente, las mujeres enfrentan desafíos diarios que sus pares varones no. Por ejemplo, según un estudio de la Universidad George Washington citado por la revista Forbes, las mujeres son interrumpidas por hombres un 33% más. Esto atenta contra la confianza al momento de expresar ideas o simplemente, debatir en grupos mixtos. Trabajar en pos de espacios donde todos puedan tener margen para comunicarse, es vital para incentivar el liderazgo.
  2. Apuesta en políticas de empresa que fomenten la paridad. La Ley de Igualdad nos obliga a lo obvio. Debemos iniciar procesos de reclutamiento, que eviten el prejuicio de género. Esto puede significar prescindir de solicitar el CV con foto o redactar anuncios de búsqueda en tono neutro o inclusivo.
  3. Estimula los planes de carrera. Además de brindar retribuciones salariales equitativas entre ambos géneros, es una buena iniciativa la de confiar en planes de carrera que puedan aportar a disminuir la tasa de rotación de tu empresa y a cultivar el talento femenino en tu organización.
  4. Invierte en mentorías. Se trata de liderar con el ejemplo. A menudo el gran problema de la falta de representatividad de mujeres en roles de poder, es la falta de modelos a seguir. Si en tu empresa ya hay mujeres en posiciones de supervisión, estas pueden brindar sesiones personalizadas para inspirar y empoderar a otras a que sigan sus pasos y aprendan de sus errores.
  5. Crea “espacios seguros.” Es imposible hablar de liderazgo femenino y mujeres en el trabajo sin mencionar las situaciones de acoso y violencia que pueden darse a menudo y atentar contra el bienestar laboral. Este es uno de los grandes desafíos pendientes aun hoy en día y, por eso, es vital apostar en políticas de empresa que tengan tolerancia cero a cualquier tipo de situación de agresión o micro agresión hacia ninguno de sus miembros.

En cualquier caso, la representatividad igualitaria en las empresas no sucederá de la noche a la mañana. Para que esto ocurra, debemos poner énfasis en políticas explícitas que sean creadas en este sentido, con el fin último de lograr desarrollar y conservar un liderazgo femenino que haga la diferencia y contribuya a alcanzar objetivos de empresa.